Categorías
Eihei Kōroku Volumen 1

Una maduración de ciruelo

Una maduración de ciruelo

8. Discurso en la Sala del Dharma
(Eihei Kōroku, Volumen 1)

 

He aquí una historia. Mazu [Baso Doitsu] dijo: «Esta mente en sí misma es Buda». Damei («Gran Ciruelo», Daibai Hōjō en japonés) estudió esto durante más de treinta años, morando en la cima de su montaña, ocultando sus huellas en los sonidos del valle y los colores de la montaña. El ancestro Mazu envió por fin un monje para visitar y decirle a Damei: «El Dharma del Buda de Mazu es diferente hoy en día».

Damei respondió: «¿Cómo es de diferente?»

El monje dijo: «Sin mente no hay Buda».

Damei dijo: «Incluso si él dice ‘Sin mente no hay Buda’, yo solo entiendo ‘Esta mente en sí misma es Buda'».

El monje volvió y se lo dijo al ancestro.

Mazu dijo: «Este ciruelo está maduro». (1)

Dōgen dijo: «Esta mente en sí misma es Buda» es más profundo. Año tras año Damei maduró en pleno verano.

 

(Traducido de: véase Libros Recomendados «Eihei Kōroku. Dōgen’s Extensive Record. Leighton & Okumura»). (2)

Damei Fachang - Una maduración de ciruelo - Eihei Kōroku
Damei Fachang [Ilustración de Lacza Márta]

– Notas –

(1)

Esta historia también aparece en el Eihei Kōroku en el Discurso en la Sala del Dharma número 319 «La mente es muros, el Buda es barro» y en las palabras sobre el Dharma número nº 9 del Volumen 8. También se narra en los casos 30 y 33 del Mumonkan (La barrera sin puerta · The Gateless Barrier). Damei Fachang se considera un sucesor en el Dharma de Mazu Daoyi.

(2)

Nota adicional (N. del T.)

Puedes leer un extracto del ensayo Shōbōgenzō Soku Shin Ze Butsu, traducido como «La mente misma es ya Buda».

Está disponible, para facilitar su lectura, el archivo PDF con los Discursos en la Sala del Dharma del Eihei Kōroku traducidos en este sitio web hasta ahora. Este archivo se puede descargar en la sección de «Recursos Zen · Textos Zen», haciendo clic en este enlace.

Agradecemos de antemano cualquier comentario, sugerencia y/o notificaciones sobre erratas. Muchas gracias a todos los lectores.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Una maduración de ciruelo