Índice
La diferencia entre budas y ancestros
446. Discurso en la Sala del Dharma (Eihei Kōroku, Volumen 6)
Los budas y ancestros no deberían ser confundidos unos con otros. Aquellos llamados budas son los siete budas. Los sietes budas incluyen a los tres budas dentro del kalpa del Ornamento: el Buda Vipaśyin, el Buda Śikhin y el Buda Viśvabhū. En el kalpa de la Sabiduría hay cuatro budas: el Buda Krakucchanda, el Buda Kanakamuni, el Buda Kaśyāpa y el Buda Śākyamuni. (1) Aparte de éstos, nadie puede ser llamado un buda. Se da el caso de que, aunque hubo muchos discípulos restantes que recibieron la transmisión del tesoro del Dharma del Buda Vipaśyin, los llamamos maestros ancestrales o bodhisattvas. Nunca los llamamos erróneamente budas u honrados por el mundo. Cuando el Buda Śikhin apareció en el mundo, se le llamó indefectiblemente un buda. Esto es porque completó su práctica a lo largo de muchos kalpas. Hasta y después de los Budas Śikhin y Viśvabhū, durante sus Eras del Dharma Verdadero y del Dharma Aparente, también fue así.
Durante el kalpa de la Sabiduría, aunque el Buda Krakucchanda también tuvo muchos discípulos que recibieron la transmisión del tesoro del Dharma y sucedieron y mantuvieron el Dharma del Buda, ninguno de ellos fue llamado nunca buda. Con la aparición del Buda Kanakamuni en el mundo, indefectiblemente se referían a él como un buda, un honrado por el mundo. Hasta el Tathāgata Kaśyāpa esto también fue así, y ahora con la enseñanza del Buda Śākyamuni, esto también es cierto.
El Venerable Mahākāśyapa fue el primer ancestro de la India. Bodhidharma fue el vigésimo octavo ancestro. El Venerable Mahākāśyapa estaba dotado con treinta marcas, faltándole solo el pelo rizado blanco [en la frente, que emite luz] y la protuberancia sobre la cabeza.
El Buda estaba residiendo en el monasterio Kāraṇḍa Venuvana junto con quinientos monjes. Cuando Mahākāśyapa estaba mendigando la comida, llegó donde estaba el Buda y se sentó frente a él. El Buda le dijo: «Estás muy envejecido, tu intensidad disminuyó y tus facultades se debilitaron. Deberías abandonar las rondas de mendicidad y las doce prácticas austeras dhūta, incluyendo a partir de ahora el aceptar invitaciones para recibir comida [en los hogares de los laicos] y el aceptar ofrecimientos de mantos adicionales». (2)
Mahākāśyapa dijo: «No obedeceré la orden de Buda. Si el Tathāgata no hubiese realizado la budeidad, me habría convertido en un pratyekabuda. La enseñanza de los pratyekabudas es practicar durante toda la vida llevando a cabo la práctica austera de permanecer en un lugar remoto y tranquilo». (3)
El Buda dijo: «Muy bien, muy bien, esto tiene abundantes beneficios. Si Mahākāśyapa hace estas prácticas austeras mientras está en este mundo, mi Dharma permanecerá durante mucho tiempo y beneficiará cada vez más a los seres humanos y celestiales. Los tres destinos malignos desaparecerán y las vías de los tres vehículos [śrāvakas, pratyekabudas y bodhisattvas] se realizarán.
En otra ocasión, Mahākāśyapa escuchó a los seres celestiales referirse a él como maestro de Buda. Se levantó e hizo una postración a los pies del Buda [Śākyamuni] y dijo: «Buda, tú eres mi maestro, yo soy tu discípulo». Cuando Mahākāśyapa declaró estas palabras, las dudas de los seres humanos y celestiales se dispersaron. Aunque estaba dotado con tales virtudes, no llamamos a Mahākāśyapa un buda.
Luego, cuando Mahākāśyapa había estado realizando prácticas austeras durante mucho tiempo, por lo que su pelo y barba habían crecido mucho y sus mantos estaban destrozados, fue a visitar al Buda. Todos los monjes lo miraban con desprecio. Buda pidió que Mahākāśyapa compartiese su asiento y que se sentasen uno al lado del otro. Mahākāśyapa se negó. Buda dijo: «Permanezco en el cuarto dhyāna en mi meditación, poniendo mi mente en reposo desde el principio hasta el final pero sin perder consciencia, y Mahākāśyapa también es así. (4) Tengo una gran compasión y benevolencia, incluyendo a todos los seres, y tú también eres así, con cuerpo y naturaleza compasivos. Mi gran compasión salva a todos los seres sensibles, y tú también eres así. Tengo cuatro samādhis divinos: el primero, más allá de la apariencia; el segundo, mente inconmensurable; el tercero, acumulación de pureza; y el cuarto, sin retroceso, y tú también eres así. Tengo seis poderes espirituales, y tú también eres así. Tengo cuatro mentes establecidas: la primera es la meditación establecida; la segunda, el conocimiento establecido; la tercera, la sabiduría establecida; y la cuarta, establecida en los preceptos, y tú también eres así».
Entonces, un brahman le preguntó a Buda: «Ayer un brahman vino a mi casa. ¿Quién era?».
El Buda señaló a Mahākāśyapa. Preguntó otra vez: «Pero es un monje, no un brahman».
Buda dijo: «Conozco las reglas tanto de los monjes como de los brahmanes y Mahākāśyapa también las conoce. La virtud de Mahākāśyapa es no diferente de la mía. ¿Por qué no debería sentarse conmigo?».
Al oír todos los elogios de Buda, los monjes estaban atónitos, con los pelos de punta.
Entonces el Honrado por el Mundo relató sus causas y condiciones anteriores [en vidas pasadas] en los tiempos antiguos, cuando había un rey sabio llamado Murdhajāta, que era muy talentoso, más allá de la gente común. La deidad Indra, valorando su virtud, envió mil carruajes y luego fue a la puerta de su palacio celestial y recibió al rey. Cuando Indra salió para saludarlo, compartió el mismo asiento con el rey. Después de disfrutar enormemente de estar juntos, Indra envío al rey de vuelta a su palacio. En aquellos tiempos antiguos, Mahākāśyapa [como Indra] me pidió [como el rey] que me sentase junto a él en un asiento de nacimiento y muerte. Ahora que he alcanzado la budeidad, y con el asiento del verdadero Dharma, le recompenso su meritoria obra anterior». (5)
Cuando estaba sentado frente a Buda, los seres celestiales se referían a Mahākāśyapa como el maestro de Buda. Aunque estaba dotado con tal virtud, aún no podría ser llamado un buda. Es más, en esta época degenerada, personas sin ni siquiera una sola virtud se autoproclaman indebidamente como budas, y de ese modo difaman indiscutiblemente al Buda, el Dharma y la Sangha. ¿Cómo estos necios ignorantes podrían evitar caer en los tres reinos de maldad?
Durante veintisiete generaciones, desde Mahākāśyapa hasta Bodhidharma, hubo tanto arhats como bodhisattvas que transmitieron el tesoro de la visión del verdadero Dharma del Buda, el Honrado por el Mundo, y, sin embargo, no se refirieron a ellos como budas. Esto es porque solo después de realizar la práctica de los budas uno se convierte en un buda. La comprensión de los ancestros es completa y alcanzaron el Dharma. Pero el despertar que es el fruto de la budeidad no se realiza fácilmente. Aquellos que entienden claramente este asunto pueden ser verdaderamente sucesores de los ancestros de Buda. Para convertirse en un buda, uno debe pasar definitivamente por tres grandes kalpas asaṃkhya (inconmensurables); o debe pasar definitivamente por incalculables, incontables e impensables kalpas; o, si no, debe pasar definitivamente por un momento de pensamiento. (6) Si bien estos tres [períodos de tiempo] no son lo mismo, [la realización de la budeidad] no es ni difícil ni fácil; y no es ni un tiempo lejano ni un instante repentino de tiempo. Algunos realizan la budeidad dentro de un puño; algunos realizan la budeidad en la punta del bastón de un monje; algunos realizan la budeidad en la cabeza de un monje de manto remendado; y algunos realizan la budeidad dentro de los globos oculares de un monje de manto remendado. Si bien esto es así, el que se convierte en buda ha recibido invariablemente la predicción de un Buda anterior en lo que respecta al kalpa [del nuevo Buda], al nombre, al territorio, a los discípulos a enseñar, a la longevidad, a la era del Dharma Verdadero y a la era del Dharma Aparente. Los maestros ancestrales también reciben predicciones de estos budas, pero esto no debería causar confusión. Entender claramente este asunto es exactamente la confianza del tesoro de la visión del verdadero Dharma y la maravillosa mente del nirvāṇa de los budas y ancestros. Gran asamblea, ¿queréis entender claramente el significado de esto?
Después de una pausa, Dōgen dijo:
Barriendo indefectiblemente todo el gran espacio vacío,
Diez mil distinciones y mil diferencias
son completamente expuestas.
Una leona enseña a sus cachorros los secretos de los leones.
Todos permanecen por igual dentro de un cuadro.
(Traducido de: véase Libros Recomendados «Eihei Kōroku. Dōgen’s Extensive Record. Leighton & Okumura»). (7)

– Notas –
(1)
Se dice que estos siete son los budas de las eras pasadas, finalizando con el Buda Śākyamuni, el séptimo. Los nombres de estos budas en japonés son: Bibashi, Shiki, Bishafu, Kuruson, Kunagonmuni, Kashō y Shakamuni.
(2)
Las doce prácticas austeras, dhūta en sánscrito, también incluyen vestir solo material desechado en las tumbas, vivir bajo un árbol, comer una sola vez al día y no acostarse nunca, ni siquiera para dormir por la noche. La lista completa está desglosada por Dōgen en el Shōbōgenzō Gyoji (Práctica continua). Véase: [How to Raise an Ox: Zen Practice as Taught in Zen Master Dōgen’s Shōbōgenzō, Francis Cook, (Boston: Wisdom Publications, 2002), págs. 131–132 ó Enlightenment Unfolds, Tanahashi, pág. 132]. Este y los siguientes relatos sobre Mahākāśyapa están citados por Dōgen del comentario de Zhiyi sobre el Sutra del Loto, aunque todos aparecen en los Agamas, los primitivos sutras pre-Mahāyāna. Véase: [Zenno Ishigami, ed., Disciples of the Buddha, Richard Gage and Paul McCarthy, trans. (Tokyo: Kōsei, 1989), págs. 35–36].
(3)
«La práctica austera de permanecer en un remoto y tranquilo lugar», solo o con solo unos pocos monjes en lugar de en un gran monasterio, es la primera de las doce dhūtas.
(4)
Las dhyāna eran las meditaciones indias pre-budistas, con cuatro etapas de desapego cada vez más refinado. La cuarta es el estado mental más elevado en el mundo condicionado. En China esta palabra dhyāna se utilizó también de forma más general para la meditación, y el nombre Chan en China, pronunciado Zen en Japón, proviene de esta palabra.
(5)
Se decía que Murdhajāta (Bundakatsu en japonés) era una encarnación previa de Śākyamuni y que había nacido de la cabeza de su madre. En una versión muy diferente de la historia citada aquí por Dōgen, se decía que Murdhajāta había sido expulsado del palacio celestial de Indra tras haber suscitado el ambicioso deseo de suceder a Indra como gobernante del cielo.
(6)
Este «un momento de pensamiento» evoca la enseñanza de Zhiyi de que hay tres mil pensamientos en un momento. Para Dōgen, un momento puede incluir inconmensurables kalpas.
(7)
Nota adicional (N. del T.)
Está disponible, para facilitar su lectura, el archivo PDF con los Discursos en la Sala del Dharma del Eihei Kōroku traducidos en este sitio web hasta ahora. Este archivo se puede descargar en la sección de «Recursos Zen · Textos Zen», haciendo clic en este enlace.
Agradecemos de antemano cualquier comentario, sugerencia y/o notificaciones sobre erratas. Muchas gracias a todos los lectores.