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Un cucharón de madera golpeando en el lugar que no podemos evitar
138. Discurso en la Sala del Dharma de aprecio al Tenzo [jefe de cocina] [saliente] (Eihei Kōroku, Volumen 2)
Yo, Daibutsu (Granbuda), fui el primero en transmitir el Dharma [los métodos y la actitud] a los tenzo de los templos de Japón. Anteriormente esto no existía aquí. Actualmente, ¿por qué tenemos esto? Ciertamente este [Dharma para los tenzo] son los vestigios de los antiguos sabios y anteriores respetables tales como Guishan, Jiashan, Wuzhuo y Xuefeng, quienes practicaron con sus manos tendidas. Su anterior compromiso incondicional y afirmación [de la práctica del tenzo] es la mayor virtud. ¿Quién puede apreciar sus límites? No solo plantaron buenas raíces en los lugares de uno o dos budas, o incluso de tres, cuatro o cinco budas, sino que nos damos cuenta claramente de que en las asambleas de innumerables e inconmensurables budas practicaron muchas virtudes, hicieron esfuerzos diligentes, se realizaron, completaron [su práctica] y administraron su trabajo activa y cuidadosamente. Por eso se dice: Si tenéis fosas nasales, os daré fosas nasales; si no tenéis fosas nasales, os quitaré vuestras fosas nasales. (1)
Dōgen levantó derecho su hossu y dijo: Este es el principio de no quitar y no dar. Por tanto, las fosas nasales no se engañan ni por mí ni por vosotros. Si alguna vez, de repente, vuestra nariz fuese reemplazada por una flauta sin agujeros, no podría estar colgada recta en vuestro pico como antes. Si deseáis tocar la música de Shaolin, acabaréis tocando «Encantadoras flores de ciruelo». (2) Si queréis tocar la música de Jetavana Vihāra, acabaréis tocando una melodía persa. (3) Así, cometer errores genera más errores, y colgamos nuestras fosas nasales en las entradas de la cara de sol y la cara de luna, exhalando la energía que perfora nuestras fosas nasales y emitiendo luz de nuestros ojos para abrir nuestros ojos. Entonces ya hemos alcanzado la fe. Los budas de todos los tiempos comparten en este momento las mismas manos y ojos con vosotros, y practican y afirman esto durante la totalidad de los trescientos sesenta días. Los ancestros de todas las generaciones comparten en este momento un cuerpo y una mente con vosotros, y lo mantienen cuidadosamente durante doce meses. El sol es redondo y la luna está llena; el mérito regresa para realizar la Vía.
Si de repente el cucharón de madera golpea el recipiente del arroz o la olla de servir, diferentes bocas cantan con la misma voz: «Mahāprajñāpāramitā». Normalmente cantamos sin darnos cuenta de que nuestra única potente voz está cantando: «Mahāprajñāpāramitā». Sorprendentemente, ya sea que estemos golpeando contra esto o aquello, o golpeando vallas o muros, dondequiera que vayamos no podemos evitar suscitar el cuerpo del Dharma. ¿Cómo podemos debatir sobre este lugar que no podemos evitar?
Después de una pausa, Dōgen dijo: El samādhi de cada átomo de Yunmen puede girar, tanto en la rueda de la comida como en la rueda del Dharma. (4) Traed un recipiente lleno y llenad los cuencos [de los monjes]. La confirmación del Honrado por el Mundo [de la práctica del tenzo] ha sido aplicada, y aún es fresca.
(Traducido de: véase Libros Recomendados «Eihei Kōroku. Dōgen’s Extensive Record. Leighton & Okumura»). (5)

– Notas –
(1)
Puesto que las fosas nasales están en el centro de la cara, en la retórica Zen a veces representan el rostro original o verdadero yo. En el caso 44 del Mumonkan (La barrera sin puerta), Bajiao dice: «Si tienes un bastón, te daré un bastón. Si no tienes bastón, te quitaré tu bastón». Véase: [Gateless Barrier, Aitken, págs. 264–268 ó Unlocking the Zen Kōan, Cleary, págs. 195–197].
Para las fosas nasales, véase también el Discurso en la Sala del Dharma número 69 «Presentando una ofrenda».
Dōgen escribió extensamente sobre el puesto de tenzo, siendo el más popular el Tenzokyōkun (Instrucciones para el tenzo). Hay varias buenas traducciones y está incluido en el Eihei Shingi de Dōgen, que también incluye largas secciones sobre la responsibilidad del tenzo en el ensayo Chiji Shingi «Normas puras para los administradores del templo». Véase: [Dōgen’s Pure Standards for the Zen Community, Leighton and Okumura, págs. 33–57, 136–143 y 170–179].
Para una traducción con comentario de un maestro japonés Sōtō contemporáneo, véase: [Refining Your Life: From Zen Kitchen to Enlightenment, by Zen Master Dōgen and Kōshō Uchiyama, Thomas Wright, trad., (New York: Weatherhill, 1983). Este texto ha sido traducido al castellano en la web de Roberto Poveda, «Huellas del Zen», puedes descargarlo aquí.
(2)
«Encantadoras flores de ciruelo» es el nombre de una pieza de música secular china mencionada por Rujing. Shaolin es el templo de Bodhidharma.
(N. del T.) Sobre esta pieza de música, véase el Discurso en la Sala del Dharma número 258 «Tocando la flauta de hierro».
(3)
Jetavana Vihāra era el templo donado a Śākyamuni donde practicaban sus monjes. Aunque deseamos emular a los antiguos budas, caemos en los patrones kármicos. Intentamos hacer de nuestras fosas nasales, o verdadero sí mismo, un instrumento del Dharma de Buda, pero nos falta capacidad y acabamos con música pop.
(4)
En el caso 99 del Shōyōroku, un monje le preguntó al gran maestro Yunmen: «¿Qué es el samādhi de cada átomo?». Yunmen dijo: «Arroz en el cuenco, agua en el cubo». Véase: [Book of Serenity, Cleary, págs. 425–427]. En este caso Dōgen se refiere a la equivalencia del alimento y la enseñanza cuando las comidas son preparadas adecuadamente conforme al Dharma del tenzo.
(5)
Nota adicional (N. del T.)
Está disponible, para facilitar su lectura, el archivo PDF con los Discursos en la Sala del Dharma del Eihei Kōroku traducidos en este sitio web hasta ahora. Este archivo se puede descargar en la sección de «Recursos Zen · Textos Zen», haciendo clic en este enlace.
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